Cómo dejar que la vida fluya - Día 14






Mensaje diario


La meditación de hoy se trata de aprender a dejar que tu vida fluya sin resistencia ni esfuerzo. Dejarse llevar no es algo que tengamos que entender ni practicar para que nos salga bien. Dejarse llevar es un estado de conciencia; es la consecuencia natural ser consciente del presente. En ese estado de conciencia expansiva, abierta y de aceptación no hay sensación de carencia ni de amenaza. Entonces, no hay necesidad de actuar a la defensiva ni de ser agresivo o resistirte para sentirte seguro y completo. Vivir en el presente es fluir con el universo.




Texto



Día 14 Cómo dejar que la vida fluya


El cambio es inevitable, como todos sabemos, pero aceptamos algunos cambios, mientras que nos resistimos a otros, presionamos para obtener los resultados que queremos y rechazamos los que no nos gustan, tenemos expectativas de que algún acontecimiento importante, casarnos, tener un hijo o un ascenso, mejorará todo, y cuando las cosas no salen como habíamos previsto, nos sentimos decepcionados, éstos patrones de las expectativas y la decepción, detienen el flujo de la vida, como muchas personas experimentan diariamente.


Lo opuesto del flujo es la resistencia, estar en contra de lo que esta ocurriendo en este preciso momento para que pase lo que tú quieres. Fluir tiene que ver vivir sin prejuicios ni resistencia, sin embargo, la gente dirá, a veces tengo que oponer resistencia si me enfrento a una situación que es nociva o que esta encaminada a fracasar. No obstante fluir no se trata de ceder de manera pasiva a todo y sin duda tampoco es ceder a la negatividad ni al fracaso. 


Más bien fluir implica confiar en que la vida nos dará lo que necesitamos, amor, sea cual sea la situación, estás abierto y no te resistes; si el momento actual exige fuerza, ésta surge, si el momento actual exige un avance creativo o un comentario que alivie las tensiones, surge. Todas las respuestas, incluido el amor, la intuición, la verdad, la creatividad y la bondad son posibles cuando fluyes, no hay una respuesta clara y simple, eres tan flexible en tu respuesta como la vida misma. 


Sin duda la manera arraigada a vivir en la sociedad no es así, nos han enseñado a tener reacciones automáticas, nos sentimos seguros detrás de los límites conocidos que el ego ha creado; puede que al principio estar totalmente abierto, sin expectativas, parezca amenazador, pero en la meditación experimentamos que esta conciencia abierta, ilimitada es segura. 


De hecho, a diferencia del ego, el único lugar sin temor es la apertura total, es el lugar donde el momento presente puede hacer lo que quiera, porque estamos seguros en nosotros mismos, no necesitamos defender los límites de nuestro ego y no sufrimos porque nuestras expectativas no se cumplieron.


Vivir fluyendo es una experiencia que necesita nutrirse y entenderse de primera mano. Hay etapas precisas para dejar ir, trabajar viejos temores, soltar tus reacciones establecidas y aprender el arte de permitir. A medida que el ego pierde el control que tiene sobre ti mismo, evoluciona una forma más holística de la vida, sólo en la plenitud puede haber flujo, lograr este nuevo estado, implica una travesía hacia una nueva concepción del tiempo.


Mientras nos preparamos para nuestra meditación de hoy, consideremos por un momento nuestro pensamiento central:


DEJO QUE MI VIDA FLUYA SIN RESISTENCIA


DEJO QUE MI VIDA FLUYA SIN RESISTENCIA


Ahora vamos a prepararnos para nuestra meditación, ponte cómodo o cómoda, y cierra los ojos, comienza a ser consciente de tu respiración y sólo respira lenta y profundamente, con cada respiración, permítete relajarte cada vez más. 


Ahora, poco a poco, incorpora el mantra ... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI... este mantra significa: mi individualidad es la totalidad de la vida, revela que nuestra conciencia del momento presente siempre está relacionada con todo y todos en el universo. 


Repite en silencio...AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI...  con cada repetición siente cómo tu cuerpo, mente y espíritu se abren a un estado de conciencia expandido.


Cada vez que te sientas distraído, distraída, por tus pensamientos o por los ruidos del entorno, simplemente regresa tu atención a repetir el mantra en silencio ... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI...


Por favor, continúa con la meditación, yo estaré atento al tiempo transcurrido y al final me escucharas hacer sonar una suave campana ... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI... AHAM BRAHMASMI...



Es momento de liberar el mantra, sigue sentado y relajado, inhala y exhala lentamente, cuando estés lista, listo abre los ojos despacio.


Al transcurrir tu día ten en cuenta este pensamiento central:



DEJO QUE MI VIDA FLUYA SIN RESISTENCIA


DEJO QUE MI VIDA FLUYA SIN RESISTENCIA


Namasté 🙏











PREGUNTAS  DE REFLEXIÓN

1: El cambio es inevitable, pero despierta sentimientos encontrados. Escribe cinco cosas que estén cambiando o estén a punto de hacerlo en tu vida, incluyendo aquello que te haga sentir ansioso o inseguro. Algunos ejemplos incluyen la transición a una nueva etapa en tu carrera, cambiar a un ingreso fijo, irte a vivir con tu pareja, tener más problemas de salud o dejar de estar cerca de tus amigos o familia.

 2: De los elementos que escribiste en la pregunta 1, escribe al menos tres maneras de hacer que estos cambios sean más fáciles y aceptables. Por ejemplo, puedes adoptar una actitud más optimista, hablar con un amigo cercano o miembro de la familia que haya pasado por el mismo cambio con éxito, mejorar tu dieta y hábitos de ejercicio, leer libros sobre la próxima etapa de la vida o tomar más medidas para tener seguridad financiera dentro de diez años.

3: Pensando a futuro, ¿Cuál es la mayor contribución individual que deseas hacer a la próxima etapa de tu vida, digamos en cinco o diez años? Escribe las formas en las que puedes empezar a alcanzar esta meta ahora mismo, como preparación para la siguiente etapa del trayecto de tu vida.








No hay comentarios:

Publicar un comentario