EL MOMENTO PRESENTE ES TU IMÁN Y TU BRÚJULA - Día 13






Mensaje del día


Día 13: El momento presente es tu imán y tu brújula


La mente y el cuerpo solo viven en el presente. Y en la meditación de hoy, descubrimos que el momento actual tiene un enorme poder organizador en la vida, como una fuerza magnética. El poder de nuestra conciencia siempre presente de forma automática infunde una sensación de calma y felicidad. Sanamos este momento en el tiempo, centrándonos en nosotros mismos y encontrando el lugar de la paz, la alegría y el Ser puro. Puedes poner en práctica la conciencia en ti mismo y aprender rápidamente cuando están en el presente y cuando no. Esto te permite restaurarte en el “ahora” en cualquier momento que desees.



Texto

Día 13 EL MOMENTO PRESENTE ES TU IMÁN Y TU BRÚJULA


Todas las células cerebrales viven completamente en el presente, todas las cien mil millones de ellas. Deben hacerlo así, porque las dos cosas que hacen que las células cerebrales envíen señales son ya sea reacciones químicas o impulsos eléctricos. Disparan instantáneamente.


Lo que esto nos dice es que vivir en el presente es la única manera de existir que está libre de ilusión. Sin embargo, la gente se pierde en lamentos y en revivir el pasado, repetir errores pasados y aferrarse a viejos condicionamientos y hábitos que bloquean el momento presente. El futuro también presenta una forma de irrealidad cuando fantaseamos acerca de lo que podría ocurrir, anticipamos cómo saldrán las cosas o tememos el paso del tiempo que trae la decadencia, la enfermedad y la muerte. Vivir en cualquier otro momento que no sea el presente nos incapacita.


Debido a que cada célula cerebral, de hecho, cada célula en cualquier parte de tu cuerpo, no tiene más remedio que vivir en el presente, hay una especie de magnetismo que nos lleva al ahora, si se lo permitimos. La vida está en su mejor momento cuando es fresca, nueva y espontánea.


Podemos resistir esta fuerza magnética y una de las formas más perjudiciales de hacerlo es cargando el peso del pasado, ya sea física o mentalmente. La parte física se vuelve dolorosamente visible cuando las calorías consumidas ayer se convierten en peso no deseado hoy. Pero el aspecto emocional y psicológico es fundamental, porque aquí es donde hacemos del ahora un lugar que evitamos.


Le damos la espalda al ahora cuando caemos en malos hábitos y opiniones de otros. Nos alejamos del presente cuando nos sentimos inseguros o indignos. Cuando puedes dejarte llevar por el magnetismo del momento presente, te has sanado a ti mismo en ese momento.


No hay que retrasar la felicidad para un futuro ideal. El futuro no tiene más certeza de felicidad que este día, porque en este día, la felicidad es posible y real. Lo mismo ocurre con el proceso de sanación. Lo encuentras aquí y ahora, en este mismo instante.


Sanamos este momento en el tiempo, centrándonos en nosotros mismos y encontrando el lugar de la paz, la alegría y el Ser puro que solo existe en el ahora. El proceso es natural, sencillo y sin esfuerzo. En la meditación, vivir en el ahora ocurre de forma automática, y después de un tiempo ocurre mucho más fácilmente fuera de la meditación.


Con mayor conciencia en ti mismo, aprendes a identificar cuándo estás en el presente y cuándo no. Esto te permite restaurarte en el “ahora” en cualquier momento que desees ¿Qué pasará cuando estés ahí? Nadie puede predecirlo, razón por la cual, el magnetismo del “ahora” tiene tal poder. Queremos conocer lo desconocido, que es el lugar donde siempre mora el verdadero Ser.


Mientras nos preparamos para meditar juntos, consideremos por un momento nuestro pensamiento central:


EL MOMENTO PRESENTE ME ATRAE CON FACILIDAD Y ALEGRÍA


EL MOMENTO PRESENTE ME ATRAE CON FACILIDAD Y ALEGRÍA


Ahora, vamos a prepararnos para nuestra meditación. Ponte cómodo o cómoda y cierra los ojos. Comienza a ser consciente de tu respiración y solo respira lenta y profundamente. Con cada respiración, permítete relajarte cada vez más.


Ahora, poco a poco, incorpora el mantra ... OM HREEM... OM HREEM... Este mantra abre la conciencia al presente eterno que existe en cada momento. Pone de manifiesto la calidad atemporal de la conciencia dentro de cada experiencia.


Repite en silencio ... OM HREEM... OM HREEM... OM HREEM... Con cada repetición, siente tu cuerpo, mente y espíritu abiertos, y recibe un poco más. Cada vez que te sientas distraído, distraída, por tus pensamientos o por los ruidos del entorno, simplemente regresa tu atención y empieza a repetir mentalmente el mantra ... OM HREEM... OM HREEM... OM HREEM...


Por favor continúa con la meditación. Yo estaré atento al tiempo transcurrido y al final me escucharás hacer sonar una suave campana ... OM HREEM... OM HREEM... OM HREEM . . .




Es momento de liberar el mantra. Sigue sentado y relajado, inhala y exhala lentamente. Cuando estés lista, listo, abre los ojos despacio.


Al transcurrir tu día, ten en cuenta este pensamiento central:




EL MOMENTO PRESENTE ME ATRAE CON FACILIDAD Y ALEGRÍA


EL MOMENTO PRESENTE ME ATRAE CON FACILIDAD Y ALEGRÍA


Namasté











PREGUNTAS DE REFLEXIÓN

 1: ¿En qué momentos de hoy te sentiste más presente? Estos momentos se caracterizan porque te sentiste feliz, libre, sin cargas, aceptado, vivo, creativa y lleno de energía. Refuerza lo bien que se sentía estar en el presente.

 2: Escribe los momentos de este día en los que las distracciones, la incomodidad de tu cuerpo, los malos recuerdos, hábitos, las palabras de otras personas, las emociones negativas o el estrés te sacaron del ahora.

 3: Describe tres maneras de disminuir estas influencias que te sacaron del momento presente. Por ejemplo, podrías hacer tu espacio de trabajo más silencioso o apagar tu celular por un rato.








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